Con motivo de la festividad en honor a la Ascensión
del Señor que se celebra en el distrito de Santa Catalina, ubicado en la
provincia de Huaral, departamento de Lima, la corrida mixta resultó apetecible
para los asistentes. El colombiano Pardo cortó tres orejas y el nacional
Villavicencio dos apéndices; el novillero Ancari se fue de vacío.
Cristóbal Pardo, oreja y dos orejas
Fernando Villavicencio, dos orejas y silencio
Yuri Ancari, palmas
En tarde de Sol y con la plaza llena
hasta la bandera, se dio inicio a la tarde en la localidad de Santa Catalina,
que abre la temporada de la quebrada de Huaral. Recordemos que en esa quebrada
de la cordillera huaralina, se dan corridas en: Baños, Ravira, San Juan de
Chauca, San Pedro de Pari, Santa Cruz de Andamarca, Pacaraos, Iguaril y
Vichaycocha.
El ganadero Rafael Puga Castro propietario del
hierro deCamponuevo, debe sentirse satisfecho por el resultado de sus
pupilos que envío la tarde de hoy a la plaza. Se lidiaron cuatro ejemplares de
Camponuevo, bravos y con transmisión; y uno de San Alejandro de propiedad de
Amilcar Mandujano, asaltillado que fue enrazado.
El matador colombiano Cristóbal Pardo que
viene de una larga paralización por un accidente de tránsito que tuvo el 2012,
se encuentra en franca recuperación buscando el sitio que tenía en los ruedos.
A su primero le recetó buenas verónicas jaleadas, se hizo aplaudir en
banderillas. Con la muleta tuvo momentos lucidos. Una oreja tras pinchazo. En
su segundo estuvo más relajado y con profundidad, de muleta bajó un poco de
tono, sin embargo una buena estocada y cobró dos orejas. El matador nacional Fernando
Villavicencio con su primero derrochó alegría y voluntad, muletazos de
buena factura, una estocad en todo lo alto y las dos orejas es justo premio. El
cuarto un toro, alegre de salida y con buen recorrido haciendo el avión, tomó
un buen puyazo de Pepe Cárdenas, tras quites por chicuelinas el animal se dobló
la pata izquierda y se la quebró, sin embargo siguió embistiendo, el público
protestó y el matador abrevió. Uno de San Alejandro salió para el novillero
nacional Yuri Ancari, en tipo Saltillo, tenía complicaciones
propias de su encaste, que el espada no pudo superar. Ancari sufrió una
tremenda voltereta sin consecuencias, algunos muletazos aislados y sin ligazón,
tardó con el acero y hubo algunas palmas por el esfuerzo.
Informa: Dikey Fernandez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario